Texto y fotografías: María Berini Pita da Veiga
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Incorporo una nueva entrada al blog siguiendo el hilo de la última publicada, cuyo escenario fue también un rincón menos conocido de Compostela.
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Atardecer en la Cidade da Cultura del Monte Gaiás
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Si el plan típico en Compostela es recorrer su casco histórico —Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO— puede parecer extraño acercarse hasta la capital gallega una tarde de sábado para disfrutar de una ruta a pie por los alrededores. La página oficial de turismo de Santiago de Compostela hace mención a este itinerario, ya conocido por muchos, que en mi caso comenzó en la colegiata de Santa María a Real do Sar y finalizó en la controvertida Cidade da Cultura del Monte Gaiás. Un recorrido que no supera los 4 kilómetros y que permite dar un salto en la historia de la arquitectura de nada más y nada menos que de 9 siglos —del siglo XII al siglo XXI—.
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Río Sar a su paso por el barrio que lleva su nombre
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La Colegiata de Santa María a Real do Sar se sitúa en el barrio del Sar, que debe su nombre al famoso río que lo atraviesa. Para llegar hasta esta zona desde el caso histórico es necesario bajar por calles de acusado desnivel, pues el templo se sitúa junto al río en la parte más baja de la ciudad.
Desde su fundación en el siglo XII hasta el siglo XVI fue un monasterio de religiosos agustinos. En el siglo XIX perdió, además, la categoría de colegiata, quedando reducida a simple parroquia. En la actualidad la iglesia continúa en activo y, adosada a ella, antiguas dependencias acogen un museo. Pagando la entrada se puede visitar el templo, el maravilloso claustro y el citado museo de arte sacro.
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Cierre en Santa María a Real do Sar
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A simple vista se aprecia que estamos frente a un templo románico. En el exterior, junto con los elementos típicos de este estilo, llaman la atención los arbotantes, añadidos en los siglos XVII y XVIII, al igual que parte de la fachada. La explicación a este añadido la encontramos en el interior, cuando vemos la increíble inclinación de las columnas del templo. Todo parece indicar que por culpa de un fallo constructivo, el peso de la bóveda fue insostenible y los pilares y muros acabaron cediendo, teniendo que añadirse los arbotantes como medida de contrarrestro.
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Fachada y arbotantes añadidos en los siglos XVII y XVIII
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Detalles románicos en el exterior de Santa María a Real do Sar
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En el interior de la iglesia merece la pena detenerse en varios sepulcros adosados a las naves laterales; el más antiguo es del siglo XII y otros dos, del siglo XVI.
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Interior de la iglesia y sepulcros de los siglos XII y XVI
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Pero la verdadera joya de Santa María do Sar es su claustro románico, del siglo XIII, atribuido al taller del Maestro Mateo. Desgraciadamente, sólo se conserva un ala. Tuve el placer de ver claustros románicos maravillosos —como en Santillana del Mar o en Estella—, pero ninguno como éste. ¡Impresionante! Parece imposible que en aquellos años se pudiese trabajar la piedra de tal manera que se llegase a ese nivel de detalle, a esa decoración desbordante.
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Claustro medieval de Santa María a Real do Sar
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La visita al conjunto la completa el museo, donde se exponen documentos del antiguo cenobio medieval, piezas de arte sacro y algunos restos románicos del claustro, como un impresionante león acostado.
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León acostado, del siglo XIII, en el Museo de Santa María a Real do Sar
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Desde la Colegiata do Sar, se puede subir andando hasta la Cidade da Cultura, construida en lo alto del Monte Gaiás. Por el camino atravesaremos el Bosque de Galicia, una gran zona verde donde se han plantado miles de árboles de especies autóctonas como el roble y el castaño. Senderos bien marcados e iluminados por la noche permiten pasear, montar en bicicleta, practicar running, etc.
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Subida al Gaiás por el Bosque de Galicia en Compostela
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Una vez que hemos dejado atrás el parque, llegamos a la Cidade da Cultura, la controvertida obra del ex presidente de la Xunta de Galicia Manuel Fraga. El arquitecto norteamericano Peter Eisenman fue el encargado de diseñarla y en ella se invirtieron millones y millones de euros. A día de hoy, andamios y solares desangelados evidencian que se trata de un proyecto inacabado. Los edificios que sí se han completado están ocupados por la Biblioteca e Arquivo de Galicia, el Centro de Emprendemento, el Centro de Innovación Cultural y el Museo Centro Gaiás. He de reconocer que in situ la Cidade da Cultura es más bonita de lo que parece desde lejos, aunque aún con todo no puedo decir que me encante. El paso de los años es siempre el mejor juez para el arte y la arquitectura contemporánea, así que esperaremos a ver qué pasada le juega el transcurso del tiempo a este conjunto, para poder emitir un juicio definitivo sobre él.
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Cidade da Cultura de Galicia en el Monte Gaiás
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La excursión terminó con una cena y un paseo por el casco histórico de Compostela, después de bajar el Monte Gaiás en noche cerrada. Lástima que las fotografías no sean capaces de reflejar lo bonito que es el descenso en este momento del día, con las luces de Compostela al fondo.
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Sendero iluminado en el Bosque de Galicia
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